En construcción.

La pequeña playa del ruso en el parque natural de la Sierra de Irta, es un lugar donde la naturaleza se muestra de manera extraordinaria, arena, roca, agua del mar y grandes surgencias de agua dulce hacen de este lugar una excepción en la costa de Castellón.

La playa del Pebret y la del Russo son de las pocas playas de arena que existen en el Parque Natural de la Sierra de Irta. Junto a ellas se encuentra el cuartel de carabineros que hasta mediados del siglo XX se encargaba de controlar el tráfico de mercancías.

El nombre se esta playa es debido a un personaje de Peñíscola, Jaime Sanz, sastre que se dice que sirvió a uno de los zares de Rusia.

Jaime Sanz (1851-1918) es recordado por su gran filantropía. Fue nombrado hijo predilecto de la población (1910). Emigró  y ejerció, con gran renombre, la profesión de sastre en Odesa (Rusia), donde se dice que sirvió al último zar y donde se casó con Matilde Thinot Orlouskty, rica aristócrata.

Hizo gran fortuna y, temporalmente, el “Russo”, que así se le conocía, visitaba su pueblo natal, socorriendo necesidades y financiando mejoras de todo tipo. Por ejemplo a sus expensas construyeron las escuelas (1912), las primeras escuelas públicas de Peñíscola, que aún hoy llevan su nombre, se reedificó el peiró de la Creu, se restauró la ermita de Sant Antoni, regaló un farol para la playa, la imagen de Sant Antoni, socorrió económicamente a familiares de náufragos, etc.

Una de las calas de la localidad es popularmente llamada la «playa del ruso» (apodo por el que se le conocía por por su relación con Rusia) debido a que según cuentan en frente de ella se construyó una casa para albergar a su hija aquejada de una enfermedad pulmonar.

Cuenta la leyenda que fue envenenado por querer construir un mercado municipal, cosa que debió afectar a los intereses de algún particular.